¿Cómo se forma un anillo?

Los anillos son joyas realmente versátiles ya que pueden ser utilizados tanto por hombres como por mujeres y puedes acompañar cualquier tipo de vestimenta. Son propios para todos los días y, sin duda, son detalles que embellecen nuestras manos de manera sencilla. Son el ingrediente perfecto para representar autoridad como son los anillos papales o los anillos que portan los reyes. Sin embargo, uno de los simbolismos más hermosos que tienen son el compromiso y el amor de una pareja. Pero, ¿alguna vez te has preguntado cómo se fabrican estas joyas? Quédate leyendo este blog y descúbrelo.

• Diseño: antes que cualquier cosa suceda, lo primero y más importante es hacer el diseño de la joya. Este diseño puede surgir a partir de la inspiración del joyero, la inspiración del cliente que comprará la pieza o puede ser la réplica de algo ya creado. La persona que se encargue de su elaboración deberá hacer un boceto o dibujo que le permita plasmar sus ideas o incluso mejorarlas una vez que las ve en el papel. En este punto se debe tomar en cuenta si el anillo incluirá alguna gema o no tendrá este elemento.

• Técnica: en este punto el joyero debe decidir qué técnica empleará para formar el anillo. Puede utilizar la forja, la cera perdida o el diseño 3D. La forja consiste en dar forma a una figura mediante la soldadura de varios hilos y planchas empleando seguetas y laminadoras. La cera perdida consiste en esculpir la joya para después fundirlo y obtener la pieza en metal. Para el diseño en 3D, primeramente se hace el diseño en ordenador para después imprimirlo con una impresora 3D especial para joyería. Es importante mencionar que, estas tres técnicas pueden combinarse.

• Una vez que se ha determinado el proceso que el joyero va a utilizar, se procede a iniciar el trabajo, esta es la parte más hermosa y delicada de la situación. Aquí el joyero pone todo su empeño, paciencia y entrega, elementos fundamentales para alcanzar grandes resultados. Las joyas se fabrican con metal, diamantes y mucho amor. El amor por este trabajo es evidente cuando se observa el trabajo final.

• Al terminar el proceso de fundido y armado sólo queda dar los últimos detalles. Es necesario limar las asperezas, pulir el metal, rectificar que el diamante esté bien colocado. Aunque es el último paso es un proceso que requiere mucha paciencia y observación ya que esto determinará la perfección de la pieza. El joyero pondrá su mayor atención porque sabe que, si se le escapa algún detalle por mínimo que sea, de nada habrán válido todas las horas de preparación y trabajo. Se dice que es la parte que con más celo se lleva a cabo.

A continuación te presentamos un video para que de manera mas gráfica puedas apreciar todo el trabajo que se lleva a cabo.

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